¿Has tenido un jefe que ha sido una pesadilla digna de película de terror? A lo mejor recuerdas a un directivo o empresario con un ego tipo Cristiano Ronaldo, arrogante y tan pagado de sí mismo que nada ni nadie nunca estará a su altura. Esos son los Líderes Yoístas. ¿Qué te han enseñado esos tipejos y su retorcida forma de liderar?
Los Líderes Yoístas quizá vienen de esa imagen tan típica del líder hecho a sí mismo. Del tipo con la boina y el salchichón bajo el brazo que empezó sin saber leer y escribir bien, cargando sacos en el puerto, y volvió todo un millonario. Hoy es un gran CEO y da conferencias donde le inviten y le den un buen masaje de ego.
Hemos pasado por una etapa de CEO Worship (adoración del CEO). En escuelas de negocio y universidades nos han machacado con todos esos ejemplos de grandes líderes. Que si Steve Jobs, que si Bill Gates, ya sabes.
El caso es que esa obsesión por los grandes líderes, nos ha llevado a ensalzar aspectos del liderazgo que no son especialmente edificantes. Por ejemplo, la creatividad y determinación incansable de Steve Jobs, parece que han tapado su tendencia a ser, pongamos… difícil, en su trato con… digamos, todo el mundo. Desde su familia hasta los miembros de su equipo.
En nuestro entorno, no dejamos de ver cómo se ensalza a empresarios y presuntos líderes con una capacidad cuanto menos cuestionable para liderar de forma sostenible y respetuosa con los demás. Y cada vez que dan un paso más en sus entornos, más se crecen en su Yoísmo. Se creen invencibles. Capaces de ofender a quien sea. De actitudes claramente sexistas, xenófobas, o claramente contrarias a lo que cualquier ser humano de buena fe considera respetar al próximo.
Estos líderes del postureo, son lo contrario de la cultura colaborativa de superación auténtica. Cuando las cosas van bien ellos son los héroes de la película y nadie más merece el mérito de su éxito. ¿Y cuando las cosas van mal? Bueno, está claro, ¿no? Están rodeados de incompetentes y ellos son quienes tienen que salvar el mundo una vez más.
El liderazgo no va de estrujar el mayor rendimiento posible de las personas a las que se utiliza en un negocio con un fin determinado. Y ciertamente no depende de una lista de cualidades que se ejercen para todo como una navaja suiza multiusos.
Situaciones diferentes requieren habilidades de liderazgo diferentes. Y eso requiere líderes humildes capaces de asumir que no lo saben todo y que han de aprender nuevas habilidades ante situaciones de incertidumbre.
Los líderes que estrujan resultados están perdiendo la batalla. Los líderes que atraen y retienen el talento por las razones correctas, son aquellos que se creen menos importantes y que son capaces de inspirar a otras personas sin importar los desafíos a su alrededor.
¿Por qué deberías huir del Liderazgo Yoísta?
- El Yoísmo destruye la capacidad de crecimiento de una organización. No puede haber más de un supermán en la empresa. Por lo tanto, los demás superhéroes se dan el piro y buscan su propio X-Men para desarrollarse.
- El Yoísmo paga sueldos por habilidades que infrautiliza o literalmente desprecia. No construyas una secta yoísta, trabaja por construir un ecosistema con una cultura verdaderamente colaborativa en la que lo normal es que todos aprendan y creen valor en una rendición de cuentas mutua y positiva.
- El Yoísmo ofrece feedback destructivo o no lo ofrece en absoluto. Los líderes que no ponen los puntos sobre las íes cuando alguien no se ponen las pilas a menudo pierden oportunidades de ayudar a otros a desarrollarse. Y pagan el precio con creces con plantillas desmotivadas, faltas de equilibrio o directamente improductivas y que operan en claro conflicto con los valores de la organización. Ayuda a tu equipo dando feedback generoso y constructivo. Sé específico en ofrecer guía a las personas a tu alrededor y muéstrate dispuesto de forma sincera a aceptar su ayuda y feedback también. Y presta atención, no desestimes rápidamente sus aportaciones. Más vale una vez rojo, que ciento colorao… ¿no?
¿Qué tipo de líder eres? ¿En qué tipo de líder quieres convertirte? Tu capacidad para crear proyectos de éxito es directamente proporcional a tu capacidad de mejorar tu manera de liderarte a ti mismo y a otras personas. Piénsalo. Todo tu futuro depende de ello.
Ahora es tu momento de mejorar tu liderazgo. Y seguramente una de las mejores formas en las que puedes hacerlo en formarte, y compartir experiencias y estrategias formando parte de un grupo tipo mastermind. Pero eso será objeto de otro artículo. Vuelve por aquí y compartimos sobre el tema como cada semana.