Las mejores ideas se me ocurren a las seis horas. ¿Te pasa a ti también? Eso tiene sus inconvenientes.
Habrá veces que te enfrentarás a abusones en el mundo de la empresa y los negocios. Personas que gestionan las relaciones como si de peones de ajedrez se tratara. ¿Cómo puedes defenderte? Déjame compartir contigo algunos de mis aprendizajes de la última década.
La calidad de las personas se percibe por cómo te tratan
cuando ya no pueden utilizarte.
Cuando una persona quiere manipularte ya tiene un guión para la conversación y probablemente un resultado en mente. Y no va a dejar de hacerte comentarios dirigidos y enfocados a la opción que ya tiene en mente. ¿Por qué? Porque es el escenario que más le conviene por las razones que sean. Si tú vas de buena fé y confías en que la otra persona actúa del mismo modo, y no resulta ser así, estás en clara desventaja. ¿En qué sentido? Seguramente tú no estás mentalizada para reaccionar de forma asertiva, firme y potente, para protegerte de esas interacciones nocivas.
En la estrategia militar esta estrategia para abordar a un rival se conoce como emboscada. Con la experiencia, lo ideal es no dejarse emboscar, ¿no te parece? No siempre es fácil. En sí misma, esta táctica radica en esconder las intenciones reales hasta que la víctima ya está en una situación sin salida.
Amy Cuddy, autora en psicología social de éxito, afirma que si la otra persona crea una situación de poder, el efecto que provoca es el contrario. Por lo que los machos alfa o hembras alfa, durante la interacción contigo procuran incluso con su lenguage no verbal establecer su alcance, marcar su territorio de forma visible. El efecto que suelen provocar en la otra persona es a empequeñecerse, a hacerse pequeñita.
La mejor manera de evitar el bullying empresarial es estar preparados. ¿Cómo podemos lograrlo? Tres aprendizajes al tratar con personas manipuladoras:
Interioriza una pregunta y úsala. ¿Por qué? ¿Cuál es el motivo de la otra persona planteando esa pregunta? Pregúntale.
No te des prisa a responder. Nadie te pone una pistola en el pecho. Hay personas manipuladoras que usarán tu respuesta para hacerte bullying (intimidación, hostigamiento) en algún momento de tu carrera.
No siempre la pregunta merece una respuesta. Los manipuladores plantean preguntas como redes de pesca. Buscan llevarte a una situación muy concreta. ¿Por qué? Quieren modificar la percepción tuya o de otras personas sobre una realidad. Y cuando son hábiles puedes darte cuenta demasiado tarde. Date permiso para contestar a un bully (abusón) «No voy a contestar a eso».
No tienes por qué quedarte. Puedes declinar y marcharte sin participar en la reunión – emboscada.
Las cuatro preguntas que pueden ayudarte a protegerte de los bullies obligándoles a exponer sus intenciones:
a- Interesante, ¿puedes explicarte un poco mejor?
b- Ok, … ¿por qué me dices algo así?
c- Lo que me llega de lo que me estás diciendo es que quieres [a ó b] y esperas que yo [x ó y] … ¿por qué actúas así?
d- Entiendo, y … ¿por qué me preguntas algo así?
Los abusones tienden a ser económicos con la verdad. Y probablemente utilizarán tus emociones para sacarte del partido. Si te dejas arrastrar por la presión del momento, te sacarán del partido. Además de clarificar sus intenciones con preguntas bien directas, rehúsa tratar el asunto si no es el momento de hacerlo para ti. No entres a jugar con sus reglas. Si sientes que están jugando contigo, puedes despedirte cortésmente y salir de la reunión. Los «ahora o nunca» son herramientas de manipulación. Tú puedes decidir cuándo y cómo.
¿Has tenido que enfrentarte a bullies o abusones en los negocios? Comparte tu historia.